El término “código abierto” hace referencia a software cuyo código fuente se ha puesto a disposición de todo el mundo de manera gratuita y otorgado con licencias que facilita su reutilización o adaptación a contextos diferentes.
El concepto también relaciona a una cultura que promueve el intercambio de ideas y valoriza la colaboración para mejorar el código de otros. El movimiento defiende su legado de colaboración, y ha producido una serie de manifiestos abogando por el desarrollo abierto de software. Los argumentos a favor se consolidan en los 10 principios reconocidos hoy como su definición.
El uso de código abierto
Software de código abierto tiene la posibilidad de ser reutilizado en otras partes del mundo; es decir, las herramientas tecnológicas creadas para enfrentar un desafío de desarrollo para un lugar en particular pueden ser transferidas y adaptadas al contexto local de otro lugar en el que exista un problema similar. Lo mismo, cuando uno desarrolla una nueva adaptación de un producto abierto, que se compromete de publicarla en un formato abierto también, así alimentando un ciclo virtuoso.
Código abierto en BID
Algunos ejemplos muy reconocidos incluyen el gestor de contenidos WordPress, navegador de web Firefox y el sistema operativo Linux.
Creemos que la reutilización y adaptación de código presenta oportunidades potentes para la transformación digital en LATAM y el Caribe. Por eso reconocemos el software oficialmente como un producto de conocimiento. El software tiene un rol importante en mucho de lo que hacemos. A veces desarrollamos software para responder necesidades de los países en la región o necesidades internas de la institución.
Buenas prácticas para abrir el código
Si quieres trabajar en código abierto, hay ciertas prácticas que tendrás que adoptar. Las normas para abrir el código incluyen
- Publicar el código fuente en un lugar accesible al público y acompañarlo con documentación adecuada, facilita su reutilización o adaptación.
- Evaluar el código para anotar posibles áreas de mejora.
- Licenciarlo asignando al código una licencia abierta apropiada.
Finalmente, enfocarse en accesibilidad y diseño centrado en el usuario, es una buena práctica para el desarrollo de soluciones digitales; también debemos considerar que es una preocupación relevante cuando estamos desarrollando soluciones con una intención de apertura.